domingo, 29 de diciembre de 2013

novelas para gamers

Se me ha llegado a acusar de que mis descripciones son pobres, que no ahondo en el ambiente de mis narraciones.
Sin embargo, yo escribo libros en formato e-book, libros electrónicos (entre otras cosas, porque ninguna editorial ha apostado seriamente por mí).
En este formato de novela corta, en el que el lector tiene que leer a través de una `pantalla, de ordenador o de tablet o de kindle, no veo oportuno detenerme demasiado en los detalles. Además, yo lo prefiero así. Como lector, disfruto mucho más de una novela cuando a los personajes les pasan cosas, y no cuando el autor gasta una, dos o hasta tres páginas enteras, en la descripción (por ejemplo) de una habitación, haciendo gala de un amplio léxico, aunque con ello corra el riesgo de invocar al bostezo del lector.
Además, entiendo que alguien que compra e-books hoy en día, es alguien que está habituado a usar las nuevas tecnologías, y que por lo tanto, también es muy probables que sea un gamer, o dicho de otra forma, un juegón, una persona adicta a los videojuegos.
Y ciertamente, "La Asesina Escarlata", al igual que el resto de mis novelas, están escritas para estos gamers, gente que mientras lee, ya intenta anticiparse al protagonista a la hora de resolver y superar los obstáculos que se le presentan en el camino. No se detendrán a leer descripciones largas aderezadas con una rica prosa, no creo que sea lo que buscan cuando se proponen leer un libro, porque a esta gente, lo que más les gusta, es resolver misterios, acertijos, o simplemente, la violencia pura y dura.

sábado, 21 de diciembre de 2013

La influencia de Jean Griraud "Moebius".

El momento en que me imaginé el mundo de "La Asesina Escarlata", fue durante un curso de guión que se me pidió que dibujara un entorno para una historia corta.
Y luego comprobé, que lo que dibujé se parecía mucho al trabajo de uno de los grandes autores del cómic, un francés que cuando hacía western se llamaba Jean Giraud, y cuando hacía ciencia ficción firmaba como Moebius.


Y en homenaje a este dibujante, he bautizado la ciudad alienígena en donde suceden las aventuras de "La Asesina Escarlata", con el nombre de Moebial.

viernes, 20 de diciembre de 2013

El Credo de los Asesins.

Como ya he mencionado en la primera entrada de este blog, tuve que cambiar el título de "Muerte Escarlata" por "La Asesina Escarlata".
Y ahora, que lo veo en perspectiva, puede que fuera lo mejor que lo que podía pasar.
Y es que cuando escribí esta humilde novela, reflejé en ella ciertos temores que estaban muy en boga en esa época, anterior a la de ahora, que solamente se habla de crisis, crisis, crisis...
Y uno de ellos, era el temor al fundamentalismo religioso, implantado por el !!-S y por la posterior Guerra contra el Terror, que llevó a los países de occidente a enviar tropas a oriente medio, embarcadas en modernas cruzadas, como las de la edad media.
Y es que los peores enemigos humanos de la Asesina Escarlata son fundamentalistas religiosos, individuos que están tan convencidos de que Dios está de su parte, que se ven con autoridad de sobra como para poder cometer todos los crímenes que se les pase por la cabeza.
Ahora bien, no definí un bando de buenos y otro bando de malos, un fundamentelista religioso, es un fundamentalista religioso, independientemente de cuál sea su religión. Así que definí dos grupos, uno bien asentado, y otro carente de recursos, que mantenían una guerra del terror dentro de los límites de esta urbe alienígena y futurista.
Y como esta novela está ambientada en un futuro lejano, también me inventé dos religiones, que sin embargo, se parecen mucho a las dos religiones monoteístas y mayoritarias de hoy en día.
Pero también partí una lanza por la gente que es religiosa pero no violenta. De hecho, en su viaje por encontrar su verdadera identidad, la Asesina Escarlata encuentra trabajo para un jeque, un hombre de negocios muy importante, que contrata a nuestra protagonista para que sea la guardaespaldas personal de la más  pequeña de sus hijas. Y además, aceptó el puesto cuando ya se la conocía en los bajos fondos con el sobrenombre de la Asesina Escarlata.
En otras palabras, la protagonista de mi novela es una Asesina, que trabaja para un hombre que procesa una fe derivada del Islam, y que se las va a tener que ver con enemigos radicales que practican otra religión derivada del Cristianismo.
Y la palabra "Asesina", es lo que quedó como imprevista referencia a los primeros Asesinos, o Asesins. Así era el nombre de una orden religiosa del Islam, que durante el periodo de las cruzadas, luchaban contra los enemigos cristianos embriagados con una dosis de opio. Es más estos Asesins son muy populares hoy en día, por que son los protagonistas de una exitosa saga de videojuegos, ambientados en diferentes épocas históricas.
Y es que la ciencia ficción puede abordar estos temas sin que nadie se ofenda, y de paso,  denunciar la tendencia lamentablemente cíclica que tienen los seres humanos de repetir los mismos errores a lo largo de la historia de la humanidad.

viernes, 13 de diciembre de 2013

Luis Royo a dos pasos del infierno.

He de admitir que uno de los artistas que más han influenciado en mi obra, fue Luis Royo, y sus mujeres, sobre todo las que son fuertes, guerreras y aventureras. Para los que no sepan de quién se trata, os dejo este vídeo para que os hagáis una idea de cómo es su arte.


Y es hoy en día, un pintor tiene que ganarse la vida como ilustrador... Peeerooo, estaría bien que la portada de "La Asesina Escarlata" estuviera a la altura de este gran maestro.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Ciencia ficción para todos.

Uno de los escollos más grandes a los que se tiene que enfrentar un autor de ciencia ficción, es la de enfrentarse a ese concepto tan manido y que tan bien funciona, que es la de que el lector se identifique con el personaje.
En este género, es algo muy difícil de conseguir. ¿Cómo hacer que el lector se identifique con alguien que puede viajar a otros mundos y se las tiene que ver con alienígenas y otras cosas que son aún más extrañas?
Es por esta razón, que la ciencia ficción es un género que normalmente se dirige a un publico restringido de intelectuales inquietos, conocidos por el común de los mortales como "frikis", pues se considera que este tipo de gente no es muy abundante en esta sociedad en la que nos tocó vivir.
Por lo tanto, si el autor de ciencia ficción quiere tener lectores, tendrá que recurrir a trucos sutiles, para enganchar a la lectura a un público potencial que no tiene que estar necesariamente formado para poder comprender lo que el autor le está contando.
Urge pues que el autor use un lenguaje lo más sencillo posible, sin tecnicismos ni bonitos palabros provenientes de la jerga científica. El autor debe tener presente que una de sus funciones es instruir, y no recordar al lector lo ignorante que es.
Otro truco que funciona bien, es que el personaje principal sea muy joven, como un niño. Así se verá obligado a aprender las reglas y los subterfugios del entorno en donde vive para poder salir adelante. Es un juego de aprendizaje que funcionó muy bien con la saga literaria de Harry Potter. Hoy en día, hay millones de lectores que sabrían vivir en ese mundo lleno de magia y brujería.
Y también está le truco al que recurro en "La Asesina Escarlata", que es recurrir a un protagonista que sufre amnesia, y que tendrá que hacer un duro proceso de aprendizaje para conocer el entorno tan extraño en el que vive, y a si mismo.
Aunque hay un tercer truco, que es el de estimular ciertas funciones cerebrales del lector relacionadas con la reproducción y la perpetuación de la especie, como sugiere la portada de mi novela.